Vacúnese mejor contra la desinformación

FA/CMR

Cuando se hace necesario el éxito en la vacunación de la población, para asegurar contener la pandemia, resulta que  aquellos espacios donde creemos sentirnos seguros en el mundo digital atentan contra esta urgencia desplegando toda clase de falsedades que se cuelan con mucha facilidad en su muro de facebook, su timeline de twitter o en lo que supone, instagram, que le interesa. Y sus amigos y familiares empiezan además a asumirlas como ciertas, por lo que la información también rebota por esas vías.

No importa si usted es negacionista, demócrata o republicano en Estados Unidos, o venezolano de la diáspora o que hace vida en nuestro territorio, europeo o asiático. La información falsa se alimenta de su mejor amigo, el algoritmo. Además sabemos que en la historia los rumores siempre han llegado más  lejos que la verdad.

Desde falsedades sobre la gravedad de la pandemia, desinformación sobre la seguridad y la eficacia de las vacunas y rumores de las redes sociales sobre cómo prevenir o tratar el COVID-19 sin vacunarse, todas ellas llegan sin obstáculos a usuarios de la web como usted y como yo.

The Associated Press identificó vía News Guard, una compañía de tecnología que analiza la credibilidad de los sitios web, múltiples páginas de Facebook y de cuentas de Instagram, que en conjunto cuentan con millones de seguidores, donde se  han hecho afirmaciones falsas sobre la vacuna COVID-19 o se ha intentado persuadir a las personas de evitar inoculársela. 

En el mundo virtual no hace falta seguir esas páginas para que usted vea esa información, basta que alguien  que siga esa información la comparta con usted o que el tema que usted le interesa,  lo conviertan en parte de su narrativa, quienes hacen parte de esta conspiración.

Chine Labbe, editor en jefe para Europa de News Guard, dijo que los mensajes contra las vacunas de EE. UU. estaban comenzando a ser recogidos por grupos similares en toda Europa.  ‘La velocidad a la que viajan las narrativas falsas solo se ha acelerado durante la crisis. Los proveedores de información falsa se han vuelto más inteligentes. Saben cómo jugar con el sistema”

En un artículo de Político, citan a Lisa Fazio, profesora de psicología en la Universidad de Vanderbilt, quien dice que  “La vacilación y la información errónea sobre las vacunas podrían ser una gran barrera para que se vacune a una cantidad suficiente de la población para poner fin a la crisis”

Google, Twitter y Facebook dicen que han eliminado millones de piezas de información errónea sobre COVID-19, prohibieron usuarios, grupos y canales en línea que promovieron estas falsedades y facilitaron que las personas encuentren información de salud pública sobre la pandemia. Sin embargo, esa información no luce tan atractiva como un buen chisme, que es la forma en la que se visten las fake news.

Facebook también prohibió los anuncios que desalientan las vacunas y dijo que ha agregado etiquetas de advertencia a más de 200 millones de piezas adicionales.

Pero algunos de los videos de YouTube originalmente prohibidos todavía se pueden conseguir  en Facebook meses después de haber sido marcados inicialmente.

Por su parte, YouTube, ha eliminado desde febrero de 2020, más de 800.000 videos relacionados con información peligrosa o engañosa sobre el coronavirus

Twitter advierte que revisa continuamente sus reglas en el contexto de COVID-19 y las cambia según la orientación de los expertos. A principios de marzo, agregó una política de ataques que amenaza, con prohibiciones, a los propagadores repetidores de desinformación sobre el coronavirus y las vacunas.

La política también ha jugado de juez y parte para su propio beneficio en detrimento de la verdad y la salud de la población. Los grupos de extrema derecha en Alemania y los Estados Unidos han utilizado falsedades sobre el Covid 19 y las vacunas para atacar a líderes políticos, incluso a través de narrativas como la de QAnon. Los activistas contra las vacunas en la Unión Europea, los EE. UU. y más allá, también han promocionado historias de terror, mostrando presuntos efectos secundarios de las inyecciones para advertir casi siempre de modo urgente a las personas que no las reciban.

El partido Alternativa para Alemania, de extrema derecha, es un ejemplo de ello.

Probablemente usted ha leído o visto informaciones como que el cloro que se le coloca a las peceras es bueno para tratar el virus, o que los israelíes que se vacunaron con la dosis de Pfizer murieron.En muchos de ellos se cita a David Icke, el teórico de la conspiración británico; a Rashid Buttar, un anti-vacunas; y otros provienen de contenidos expresados en Plandemic, un documental online que promueve falsedades. Pero nada de eso es verdad.

Eso explica por qué, vemos con asombro, que todavía amigos o familiares muy cercanos, con formación y responsabilidades que le harían indispensable ser vacunados, se niegan a hacerlo.Por eso, amigo, amiga,  vacúnese mejor contra la desinformación.