En un artículo publicado el 23 de marzo en Five Thirty Eigth, un agregador estadounidense de encuestas, por Perry Bacon Jr., se afirma que “La mayoría de los estadounidenses, alrededor del 55 por ciento, aprueba el desempeño laboral del presidente Biden hasta ahora, mientras que alrededor del 39 por ciento lo desaprueba. Esas son cifras bastante buenas para un presidente en esta era polarizada. Y para que los demócratas mantengan el control de la Cámara y el Senado de los Estados Unidos el próximo noviembre, Biden probablemente necesitará mantener sus índices de aprobación en esta zona”.
Estos datos de aprobación presidenciales han sido un indicador bastante aproximado para prever las tendencias en las elecciones intermedias en años anteriores, por esa razón es importante hacerles seguimiento.
Según describe Perry Bacon en Five Thirty Eigth, “en los últimos cuatro (2006, 2010, 2014, 2018), el índice de desaprobación del presidente en ejercicio fue más alto que su aprobación, y en los cuatro casos, el partido del presidente perdió un bloque considerable de escaños en la Cámara”.
Pareciera sugieren que la gente se va desilusionando de sus presidentes y prefiere elegir al partido opuesto en las elecciones intermedias.
Veamos por ejemplo qué ocurrió en noviembre de 2018, cuando el entonces presidente Trump tenía un índice de aprobación del 42 por ciento, en comparación con un índice de desaprobación del 53 por ciento.
El resultado fue que los demócratas ganaron alrededor del 53 por ciento de los votos en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, en su abrumadora mayoría de personas que desaprobaban a Trump.
Pero hay otras variables que entran en juego, cómo la conducta como votantes de republicanos y demócratas cuyos porcentajes de participación difieren claramente. Los republicanos participan en índices mayores que los demócratas. Además, los republicanos tienen mucho más control sobre el proceso de redistribución de distritos que los demócratas, por lo que podrían trazar líneas aún más favorables para ellos antes de las elecciones del próximo año, advierte Bacon .
Concluye el portal, que “Biden pudiera mantener un índice de aprobación a mediados de los 50, sería de gran ayuda para los demócratas, en particular, los candidatos a la Cámara en distritos indecisos y los candidatos demócratas al Senado en estados competitivos como Arizona, Georgia, New Hampshire, Nevada, Carolina del Norte, Pensilvania y Wisconsin. Y si Biden pudiera llevar su índice de aprobación por encima de los 50, es difícil imaginar a los demócratas perdiendo la Cámara o el Senado.(IMAGENES VARIADAS DE BIDEN)
Las acciones del gobierno de Biden entran en revisión cada cierto tiempo pero enfrentan su prueba mas contundente en esas elecciones el año 2022.
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