La inflación de Estados Unidos se disparó en mayo hasta su tasa más alta de los últimos 40 años, el 8,6 %, una nueva escalada de los precios de consumo que vino empujada sobre todo por el fuerte encarecimiento de la energía.
El incremento mensual de los precios de consumo entre marzo y abril fue del 1 %.
El dato publicado este viernes por la Oficina de Estadísticas Laborales de EEUU es superior a lo que esperaban los analistas y acaba con la tregua de abril, cuando la tasa registró su primera bajada en siete meses.
Dany Bahar, economista del Instituto Brookings, abordó el tema en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.
“Recordemos que esta es una inflación distinta a la que conocemos en América Latina. Es una inflación causada por los fundamentales de la economía y no deberíamos esperar un inflación como la que hemos visto en los años 70 y 80 en Latinoamérica. Esto realmente es una inflación de fundamentales y estamos viendo los niveles más altos que vamos a ver. No creo que estemos en presencia de una inflación de dos dígitos”, dijo Bahar.
El experto comentó que esta es una inflación orgánica producida por varios factores.
“El más importante, es que hay una demanda de productos y servicios a lo que la oferta puede ofrecer y por eso aumentan los precios. Eso es diferente a las inflaciones que son generadas en países en desarrollo, donde se imprime dinero para cubrir los gastos del gobierno. Si bien es una inflación es alta, pero soy optimista porque la Reserva Federal ya está activada en reducir los números que estamos viendo. Sus políticas no han sido efectivas, pero es la prioridad número 1 de la Reserva Federal y de la administración Biden”, agregó.
Más allá de que la Reserva Federal ya esté atendiendo la situación, hasta ahora las medidas no han sido efectivas.
“Hay que explicar que esto es un juego peligroso, porque la manera en la inflación se puede detener es subiendo las tasas de interés, que se deben subir poco a poco. La razón es que nadie tiene la fórmula exacta de hasta cuándo deben subir las tasas de interés para que la inflación se detenga. Y eso un juego muy peligroso, porque la tasa de interés alta también tiene consecuencias negativas, porque podría generar una recesión económica”, explicó.
El experto también resaltó que el mundo está sumamente globalizado y vivimos en un mundo donde una bicicleta que se vende en Estados Unidos, tiene partes hechas en Corea del Sur, Taiwán y otros países.
“Todo lo que se trate de productos transables, al aumentar los precios en una parte del mundo, automáticamente subirán en otro. Vivimos en una economía muy globalizada donde todo lo que consumimos depende mucho del comercio exterior. Por eso vemos que la inflación no es un fenómeno solo de Estados Unidos, sino del mundo entero. Sin embargo, hay fenómenos particulares de Estados Unidos como el paquete de estímulo aprobado por la administración de Joe Biden”, expuso.
Finalmente, Bahar destacó que hay cierta estabilidad en los mercados, a pesar de que el último informe la inflación fue más alta del mes anterior.
“Creo que estamos llegando a un pico y hay cierto optimismo de que la Reserva Federal logrará controlar la inflación”, puntualizó.
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