Un grupo de hackers ingresó en las bases de datos de la Inteligencia militar del régimen de Maduro y reveló información sobre las actividades de supuestos agentes de Hezbollah, el grupo terrorista libanés respaldado por Irán, que viven en Venezuela bajo el amparo de la dictadura chavista.
Los piratas informáticos, conocidos con el nombre Team HDP, realizaron el hackeo de las bases de datos de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) en cooperación con ex funcionarios de inteligencia venezolanos, según reveló este martes un artículo del periodista Damian Pachter publicado en el medio israelí Israel Ayom.
Raúl Benítez Manaut, profesor e investigador del Centro de Investigaciones sobre América del Norte de la Universidad Nacional Autónoma de México, analizó las amenazas para la región si grupos de Hezbollah operan en Venezuela en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.
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“La presencia de Hezbollah en Venezuela evidenciada por este hackeo que se le hizo al servicio de inteligencia militar de ese país, pone en jaque al gobierno de Nicolás Maduro. Se nota que Maduro tiene dos manos para hacer alianzas. Una es la estrategia bolivariana que ya está en decaída. La otra es la amistad con grupos terroristas, islámicos radicales y con gobiernos que se consideran antioccidentales como Irán. Todo esto pone en un panorama delicado la geopolítica de América Latina, porque la descomposición política de Venezuela afecta las relaciones en toda la región”, dijo Benítez Manaut.
Para el experto, la presencia de Hezbollah en Venezuela pone en riesgo la relación con Colombia, el Caribe, Estados Unidos y otros países como México.
“Esto pone en entredicho la diplomacia latinoamericana por la existencia de estos grupos y pone en riesgo a la seguridad regional”, agregó.
La presencia de Hezbollah en Venezuela se ha denunciado desde hace varios años. Aunque el régimen de Maduro lo ha negado, han surgido muchas denuncias sobre las células de este grupo en la isla de Margarita.
“El hackeo indica que Hezbollah está muy activa en Venezuela, que tiene relaciones con el gobierno, con el ejército y con el partido bolivariano. La cuestión es qué buscan estos grupos terroristas en América Latina. Esa es la gran pregunta que deslegitima al régimen venezolano”, destacó Benítez Manaut.
El profesor comentó que desde los atentados terroristas del 11 de septiembre, había grupos islámicos en la triple frontera entre Uruguay, Paraguay y Brasil.
“Ellos se apoyaban en los gobiernos de izquierda como el de Hugo Chávez. Lo que hacían básicamente era lavar dinero. Habría qué ver por qué Venezuela hospeda a estos grupos.