Rishi Sunak, un británico de 42 años, hijo de inmigrantes indios, es el nuevo primer ministro del Reino Unido. El quinto conservador en seis años que ocupa ese puesto, que asumió oficialmente este martes.
Casi 75 años después de que, una medianoche, el Reino Unido abandonara definitivamente la India y dejara detrás un país dividido por la violencia sectaria y marcado por casi dos siglos de colonización, un hombre de familia hindú va a ser el nuevo primer ministro. La imagen, sin embargo, es demasiado potente para digerirla en un solo día.
El profesor Francisco Caraballo, abordó el tema en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.
“Sunak es un hombre ambicioso, desde muy joven entendió que quería llegar a las altas cúspides de la sociedad británica. Es un hombre ambicioso, trabajador, estudió en escuelas costosas. Su familia no era particularmente rica, pero hicieron el esfuerzo y él sacó provecho de esto. Llegó a Oxford, luego estuvo en Estados Unidos en Stanford. Se casó con una mujer profundamente rica y se metió en la política. Lo que sucede hoy en Reino Unido, que es una cuestión extraña, y distinta a lo que era antes, es que los políticos llegan al Parlamento y años después, cuando la suerte les sonríe, llegan a los grandes puestos. Sunak tiene 6 años como parlamentario y es una carrera muy corta, si pensamos que Churchill estuvo hasta 30 años haciendo política antes de llegar a la primera magistratura, es una gran diferencia. Sunak es una gente que sabe de dinero y además ha tenido el puesto de ministro de finanzas. Eso tranquiliza los mercados en un momento en que la crisis es muy seria”, dijo Caraballo.
Otra característica a destacar es que llegó a Downing Street sin haber sido electo.
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“Se ha dicho que Sunak es el Barack Obama británico y hay una gran diferencia, Obama ganó su puesto en las urnas, a Sunak lo eligió el Partido Conservador. Tiene el respeto de sus parlamentarios, tiene hoy día una cierta gracia del electorado. Parece ser sensato, pero es un gobierno que ha perdido mucha legitimidad. Llegó con una amplia mayoría al poder, cuando Johnson fue electo y hoy día esa legitimidad se ha ido perdiendo. Mucha gente clama porque Sunak convoque a elecciones, cosa que no va a pasar, porque si convoca elecciones en unos meses el Partido Conservador perdería estrepitosamente”, agregó.
El Partido Conservador confía en Sunak para estabilizar la situación política y económica.
“El problema con el Reino Unido es que hay dos crisis. Hay una crisis política muy fuerte, y es una crisis adentro del Partido Conservador. El principal reto que tendrá Sunak es el de apaciguar a sus huestes, y hacer que sus rivales no le hagan la vida imposible. Si no tiene el partido de su lado, no podrá gobernar. La otra es una crisis económica de gran envergadura. Tiene que ver con el Brexit, la inflación y la guerra en Ucrania. También tiene que ver con que este país ha perdido su identidad económica. No sabe a ciencia cierta qué es y qué representa en el mundo contemporáneo, y Sunak, si es realmente un gran político, tendrá que ayudar a darle una nueva definición al Reino Unido, en el contexto de un mundo multipolar”, acotó.
El catedrático indicó que desde el principio, Sunak fue un hombre pro-Brexit.
Para el profesor, uno de las principales adversidades para el nuevo primer ministro es su falta de experiencia.
“No es un hombre con gran experiencia política, y en estos momentos se necesita experiencia para calmar al partido y a los mercados que se sienten muy amenazados. Otra cosa que no va a ayudarle, es que es billonario y en tiempos como los que corren se les verá como un hombre de privilegios”, explicó.
Finalmente, Caraballo destacó que las dos ventajas que tiene Sunak es su juventud porque llega con bríos.
“Lo otro que tiene a su favor, es que es el primer ministro de color, lo que le dará una importancia histórica a sus gobierno”, puntualizó.
