Kylian Mbappé rechazó al Real Madrid y seguirá en el Paris Saint Germanin (PSG). La decisión del delantero francés ha causado todo un revuelo en el mundo del fútbol e incluso de la política. Se dice que hasta el presidente de Francia, Emmanuel Macron, influyó para que el futbolista se quedara en el equipo de la capital francesa.
Daniel Chapela, periodista deportivo, abordó el tema en el programa En Conducón por César Miguel Rondón.
“Pasaron muchas cosas. Mbappé dijo en algún momento que su sueño de la infancia era jugar en el Real Madrid. Incluso hubo negociaciones y un acuerdo verbal, pero las presiones que recibió tanto de su club actual, como del propio gobierno francés fueron muy fuertes. Se dice que Mbappé recibió llamadas directas el presidente francés Emmanuel Macron y de la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, para que reconsiderara su posición. Además, pusieran una gran suma de dinero en la mesa. Se dice que Mbappé va a firmar el contrato más alto en la historia del fútbol. Estamos hablando de un sueldo neto de 50 millones de euros por temporada. Además de la firma, el contrato es de 200 millones de euros por tres temporadas. Será el jugador con el salario más alto del planeta”, dijo Chapela.
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El periodista señaló que había muchos intereses en juego en el entorno del delantero francés.
“La presión de Macron tuvo que ver con el dinero de Catar, porque el PSG es uno de los llamados equipos que está subvencionado por el gobierno catarí. El PSG tiene una economía dopada y alimentada artificialmente. Se hace ver que sus ganancias son por patrocinios, pero es solo para disfrazar. El origen del dinero proviene del gobierno catarí y las relaciones entre Francia y Catar estaban en juego. Hay que decir que Francia apoyó la candidatura de del Mundial en Catar. Todas estas relaciones se hubiesen podido caer si Mbappé hubiera ido al Real Madrid. Mbappé se convirtió en un factor diplomático”, agregó.
Chapela acotó que entre Mabappé y el Real Madrid no había ningún contrato firmado.
“El delantero francés podía negociar con cualquier club desde el 1 de enero y el PSG no rompió con algo ya establecido. No había ningún contrato firmado, toda era de palabra. Lo que si hay, es un reclamo de la Liga Española por estos clubes que son financiados por un gobierno”, agregó.
Finalmente, el periodista destacó que el interés de los países árabes por financiar equipos de fútbol es para ofrecer un rostro distinto y lavar su imagen de países que violan los derechos humanos o maltratan a la mujer.
“La intención es suavizar su imagen ante la opinión pública mundial”, puntualizó.