Nicolás Maduro ha asegurado que una delegación del Gobierno de Noruega se encuentra en Venezuela gestionando los enlaces con la oposición del presidente interino, Juan Guaidó, para un nuevo diálogo político.
César Miguel Rondón analizó el tema en su programa Día a Día, con el politólogo y magister en ciencias políticas, John Magdaleno.
“Mis expectativas en cuando a la nueva negociación son especialmente bajas por dos razones. Las negociaciones con un régimen autoritario resultan cuando la coalición dominante percibe que se aproxima a un momento límite y ese no es el caso. Por otro lado, se debe configurar un cuadro de amenazas internas y externas del régimen para estimular una fractura de la coalición dominante o un acuerdo sostenido y eso tampoco es factible, porque no hay una amenaza interna para el régimen”, dijo Magdaleno.
Para el experto, lo que se puede alcanzar en las negociaciones con el régimen de Maduro son mejores condiciones en el próximo evento electoral. “Esto no es algo menor, porque puede permitir que la oposición pueda organizarse y operar de una mejor manera. En ese sentido, podrí valer mucho, pero no se logrará un acuerdo definitivo que saque a Venezuela de la crisis política”, agregó.
Desde el régimen se han referido a la nueva mesa de diálogo con cierto desdén. Jorge Rodríguez advirtió que iban a “negociar sin amnesia”, mientras que Maduro sugirió que las negociaciones fueran televisadas, como un show de televisión.
“Esas declaraciones son con la intención de socavar las bases de la oposición. En un proceso de negociación hay múltiples niveles y diversos interlocutores, pero es crucial que haya un nivel de coordinación estratégica básica. Lo que se persigue es generar tensiones dentro de la dirigencia opositora para que no haya coordinación”, indicó el experto.
En cuanto a la situación política de Venezuela, Magdaleno afirmó que no es tan pesimista.
“Ciertamente no hay una salida a corto plazo. Sin embargo, buena parte de los regímenes autoritarios en el mundo experimentaron una caída inesperada. Quien se iba a imaginar que Pinochet saldría por un plebiscito. Lo que está ocurriendo en Venezuela es que se acumulan dificultades sistémicas que le complican las ejecuciones al régimen. Tienen dificultades económicas, de control de poder y de territorio, y de cohesión. Uno de los factores de crisis que la sucesión en 2024. No hay acuerdo en la coalición dominante para un nuevo periodo de Maduro. Las crisis de sucesión suelen ser determinantes, eso puede ser una oportunidad para la oposición”, puntualizó.
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