En un artículo publicado en Infobae por el politólogo Carlos Sánchez Berzain, indica que “en Cuba, Venezuela, Bolivia y Nicaragua el tema no es la justicia politizada, es la dictadura judicializada”
El analista agrega que “en dictadura el sistema judicial forma parte impune del sistema de terrorismo de Estado que condena falsamente a los ciudadanos y da impunidad a los tiranos”
Carlos Sánchez Berzain, abogado y politólogo, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
“La justicia politizada es la justicia que dentro de un sistema democrático, se manipula dentro del poder político, se puede manipular desde el gobierno o la oposición, y quiere decir que es un defecto del sistema democrático. No obstante, eso tiene corrección, porque cuando un juez por influencia política o económica deja de ser imparcial, la democracia tiene mecanismos para corregir esa situación. El juez es acusado y separado de sus funciones. La característica de la justicia politizada es que es un defecto dentro del sistema democrático”, dijo Sánchez berzain.
El experto, estableció la comparación con lo que él llama la “dictadura judicializada”.
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“La dictadura judicializada, es un sistema de gobierno donde no hay estado de derecho. Son dictaduras como las de Cuba o Venezuela, que usan el sistema de justicia como mecanismo de represión política y como instrumento de terrorismo de estado”, explicó.
Para el analista, el terrorismo de estado es el conjunto de acto o de crímenes que se cometen desde el gobierno para producir miedo a la población
“La diferencia es que en la dictadura judicializada no hay justicia, mientras que en la justicia politizada es mala justicia”, agregó.
Sánchez Berzain afirmó que Nicolás Maduro y su gabinete es un grupo delictivo.
“Todos los días están cometiendo delitos, que van desde la violación de derechos humanos, hasta el narcotráfico. De hecho, Maduro está procesado en los Estados Unidos por ser el jefe del Cartel de los Soles. Lo mismo pasa en Cuba y el régimen de Díaz-Canel”, agregó.
Finalmente, Sánchez Berzaín destacó que las reuniones de altos funcionarios estadounidenses con el gobierno de Maduro es una contradicción.
“Lo que hay que evaluar de esas visitas es un criterio de negociación”, puntualizó.