La mayoría de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea hicieron un frente común contra la polémica ley del húngaro Viktor Orbán que prohíbe hablar de homosexualidad en los colegios y en los medios de comunicación,
El primer ministro neerlandés, Mark Rutte, fue el más tajante: «Hungría ya no tiene cabida en la Unión Europea».
El periodista Enrique Serbeto, amplió la información en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
“Hay que tener en cuenta que en el caso de Hungría llueve sobre mojado. Hay un proceso en el que se ha embarcado el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, que es un nacionalismo euroescéptico y liberal. La situación de Hungría dentro del bloque comunitario ha estado comprometida por temas anteriores. Ahora, el gobierno húngaro aprobó una ley que prohíbe hablar en televisión y en las escuelas de la homosexualidad. Esto lo hace a días de la fiesta del orgullo gay”, dijo Serbeto.
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La declaración más fuerte fue la del primer ministro de Holanda, Mark Rutte, quien dejó entrever que Hungría debería salir de la Unión Europea.
“No hay consenso en la postura de Holanda. Una gran parte de los países apoya a Mark Rutte, pero legalmente no se puede expulsar a nadie de la comunidad de países. Hay otros mandatarios que apoyan con tono bajo a Orbán, tal es el caso de Polonia, Eslovenia y otros”, agregó el periodista.
Para Serbeto la situación entre Hungría y la Unión Europea es complicada.
“Hay un pulso porque Hungría puede bloquear decisiones del bloque comunitario. La situación es muy incómoda. Habrán tensiones políticas importantes”, señaló.
En cuanto a la posibilidad de que Hungría tome la decisión unilateral de retirarse de la Unión Europea, Serbeto explicó que es un país pequeño y depende de las ayudas del bloque. “No obstante, si podrían haber sanciones en contra de su gobierno”, apuntó.
