Otro evento relevante que ha dejado este 2021 en los Estados Unidos ha sido el juicio de Derek Chauvin, el policía que asesinó a George Floyd. Había muchas expectativas porque la justicia estadounidense siempre había encontrado inocente a los policías blancos acusados de abuso de poder, No obstante, Chauvin fue sentenciado culpable de asesinato y homicidio culposo
Matthieu Mabin, corresponsal de France24 en Estados Unidos y quien le hizo seguimiento al juicio, abordó el tema en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.
“Para un periodista extranjero, la cobertura del caso de Derek Chauvin y George Floyd fue un viaje hacia adentro de la sociedad norteamericana. No solo fue un policía blanco que mató a un negro, es algo que va mucho más allá. Esto nos habla de las profundas divisiones que tiene en la modernidad la sociedad americana”, dijo Mabin.
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El periodista afirmó que tuvo la sensación de comparar una sociedad que no conoce con la que más conoce.
“En mi caso conozco más la sociedad francesa. Me llamó mucho la atención las profundas diferencias que hay en la sociedad estadounidense. La fractura que hay en la sociedad norteamericana entre blancos y negros es difícil de entender para un francés, un europeo e incluso para muchos ciudadanos estadounidenses. Lo medular del problema es que es los Estados Unidos es una sociedad que está tratando de unir sus diferencias religiosas, raciales, étnicas y políticas”, explicó el periodista.
El juicio a Derek Chauvin nos mostró a un policía arrogante, en un momento donde el supremacismo blanco tomó auge con la presidencia de Donald Trump.
“Chauvin lucía muy seguro, Habría hay que remontarse hasta el año 1865, cuando se logra la abolición de la esclavitud. A partir en ese momento, la función de la policía, sobre todo en los estados del sur, era la de perseguir y castigar a negros. Cambiar esa raíz es muy difícil. El presidente Biden tiene razón al querer transformar el espíritu policial de los Estados Unidos, pero no creo que tenga éxito porque es una tarea muy grande. Estados Unidos es una nación de vecinos, pero no quieren vivir uno al lado de otro si hay diferencias raciales, étnicas, políticas y religiosas”, puntualizó.