Qué complicados pueden ser los entramados del poder.
Este lunes, el exrepresentante y exlegislador, David Rivera, fue arrestado en el aeropuerto de Atlanta, tras una investigación y acusación cuyos cargos según AP se derivan del trabajo que supuestamente hizo el republicano de Miami como parte de un contrato de $50 millones para ayudar al gobierno venezolano y a Nicolás Maduro a reparar su relación con Estados Unidos poco después de que el expresidente Donald Trump asumiera el cargo en 2017.
La existencia de este trabajo había surgido anteriormente en medio de una demanda y una contrademanda entre Rivera y una filial estadounidense de la compañía petrolera estatal de Venezuela.
La empresa Interamerican Consulting de Rivera fue demandada en 2020 por PDV USA, una filial con sede en Delaware de Citgo, propiedad de Venezuela, alegando que el excongresista no realizó ningún trabajo como parte del contrato que firmó en 2017 por tres meses de consultoría estratégica destinada a construir puentes con partes interesadas de EE. UU.
Rivera mantuvo su inocencia y contra demandó a PDV USA.
Lo relevante es que aunque el contrato de Rivera fue con una entidad estadounidense, cualquier trabajo que realizó en nombre del gobierno de Maduro o de los intereses comerciales venezolanos habría requerido que se registrara como cabildero extranjero, lo cual no ocurrió.
Según Político.com, la acusación en sí está repleta de detalles sobre mensajes encriptados, palabras clave para Maduro (el «conductor del autobús») y dinero («melones»). Pero también profundiza en reuniones y discusiones con altos funcionarios, incluido un “senador de los Estados Unidos de Florida”.
La acusación, según Associated Press, establece que se celebraron dos reuniones con este senador anónimo de Florida en el verano de 2017. Las reuniones se centraron en un posible acuerdo con el régimen de Maduro en el que aceptaría un acuerdo para “celebrar elecciones libres y justas en Venezuela”.
En un momento, según AP, Rivera envió un mensaje de texto encriptado a los involucrados en el cabildeo y afirmó que el senador se reuniría al día siguiente con el entonces presidente, Donald Trump y que “le diría que tiene la posibilidad en sus manos de resolver la crisis…” Rivera más tarde, continúa AP, intercambió textos con el senador que decían que Estados Unidos debería “facilitar, no solo apoyar, una solución negociada”, así como “sin venganza, facilitar una reconciliación”. Menudo cabildeo político.
Por lo pronto, medios locales informan que Rivera ya fue puesto en libertad
¿quiénes además del senador están involucrados en esto? ¿A dónde conduce este hilo?
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