El mundo tiene sus ojos puestos en Qatar, la nación encargada de organizar el mundial de fútbol de este año 2022. A pesar de ser un país pequeño celebrará una competición tan importante en el mundo del deporte gracias a su gran capacidad económica y a su enorme influencia geopolítica basada en su industria extractivista de petróleo y gas natural.
Además, está en el ambiente las numerosas polémicas rodean a Qatar en torno a su defensa de leyes que violan los derechos humanos y los derechos laborales de millones de personas.
Sofía Scally, licenciada en relaciones internacionales, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
“Catar está en una posición muy complicada y este es uno de los mundiales más escandaloso y no por temas de fútbol, sino por todo lo que rodea a Catar en derechos humanos. Que no haya mujeres en las tribunas es una prueba que estamos en un país controlador, que se rige por las leyes islámicas y las mujeres no participan de ninguna manera, ni dentro ni fuera del terreno”, dijo Scally.
Mucho se ha hablado de la corrupción que estuvo detrás de la elección de Catar como sede del Mundial.
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“Creo que Catar está siendo sede del Mundial para mostrarse abiertos al mundo, atraer inversión e insertarse en la comunidad internacional. Muchas estrellas han dicho que han decidido no participar. Asimismo, está todo lo que tiene que ver con la comunidad LGBTQ, muchos de los jugadores usarán un brazalete en apoyo a esta comunidad. No obstante, creo que una vez que comience el Mundial todo esto se va a eclipsar y van a quedar en un segundo plano. La pregunta es si todo este activismo será transitorio o durará un poco más. Ya veremos si las normas en Catar se flexibilizará, pero no creo que sea posible”, explicó.
Finalmente, otra de las noticias que ha tenido mucha repercusión, es que el Emir de Catar estuvo dando apoyo económico y pagando vuelos para que aficionados argentinos viajen a Catar.
“Es un tema muy delicado. La FIFA tiene un historial largo de corrupción. No se sabe bien cuál es el límite de la fortuna del Eimir. Cuando ha estado en Argentina, hace un gran despilfarro de dinero. No sería extraño que un equipo tenga algún pago por detrás”, indicó.