Este martes se llevó a cabo la segunda noche de la Convención Nacional Republicana y el balance de los medios de comunicación es que el Presidente Donald Trump, trató de ubicarse en el medio del espacio político intentando seducir a las minorías. En éste contexto incluso se desarrolló la ceremonia de nacionalización de cinco ciudadanos afroamericanos.
La Primera Dama, Melania Trump buscó empatía con las mujeres y fue la única que hizo mención de las víctimas del COVID-19.
Sin embargo, las críticas no se hicieron esperar. Que la Primera Dama hablara desde la Casa Blanca y el Secretario de Estado, Mike Pompeo, lo hiciera desde Jerusalén, desató un torbellino de polémicas. Esto se debe a que la Constitución de los Estados Unidos establece que no se debe utilizar la Casa Blanca para actos políticos y los funcionarios públicos no deben participar en las campañas.
El analista político, Frank Mora, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
“Ayer se violaron muchas normas, reglas y leyes. Hacer una ceremonia política en la casa del pueblo. Todos somos dueños de la casa y el presidente no lo es. La ley dice claramente que un funcionario público no puede participar en actividades políticas. Hay una serie de normas que se violaron y molesta la impunidad. Donald Trump y su entorno dicen que van a hacer lo que les da la gana. Ese tipo de autoritarismo no sorprende porque es lo último que hemos visto de su administración, que es socavar nuestras instituciones”, dijo Mora.
Queda claro que Donald Trump y el Partido Republicano violaron la ley. Sin embargo, no está claro si esas acciones podrían tener un costo político de cara a las elecciones de noviembre.
“La gente lamentablemente se ha acostumbrado a este tipo de violaciones y comportamiento. Al final la gente va a votar y esto será un referéndum contra el Presidente Trump. En dos días de Convención Republicana, no hubo ningún reconocimiento de la crisis y de los casi 180.000 ciudadanos que han muerto, salvo por la Primera Dama. Uno ve la convención y me recuerda que los gobiernos autoritarios buscan confundir a la gente. El Presidente del Partido Republicano no quiere hablar de la mala gestión de Trump , sino del supuesto mundo que va a crear Joe Biden si gana la presidencia”, agregó el analista.
Mora también destacó que entre los logros de la política internacional que destacó Mike Pompeo este martes no se nombre a Venezuela, porque “el objetivo de acabar con la dictadura criminal de Venezuela, a través de una políticas de sanciones no ha tenido resultados. Solo dicen que si Joe Bidne gana, Estados Unidos será una Venezuela a gran escala”.
La campaña electoral entra en su recta final y la sociedad norteamericana continúa dividida. Las protestas han vuelto a caldearse con el nuevo asesinato de Jacob Blake, en Wisconsin.
“El país está polarizado y Trump insiste en dividir más. El Presidente es capaz de cualquier cosa y ha dicho que las elecciones serán las más corruptas de la historia. Esto es algo peligroso para la institucionalidad de este país. Trump va atrás en las encuestas y está polarizando para decir que los demócratas le robaron las elecciones. Estoy preocupado por la institucionalidad del país”, destacó Mora.
América Digital
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