Este miércoles culmina la Convención Nacional Republicana y está previsto que el Presidente Donald Trump pronuncie su discurso de aceptación desde la Casa Blanca, algo que ha causado polémica y críticas, incluso del Partido Republicano, ya que las leyes indican que la Casa Blanca no puede ser utilizada en actos partidistas.
Javier Maza, asesor y analista político, abordó el tema en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.
“La expectativa era muy alta después de ver la Convención Demócrata, donde hubo mensajes de mucho peso político. Hubo propuestas, una preocupación expresada por todos y un tono acorde considerando que el país ya está llegando a los 200.000 fallecidos y hay cinco millones de infectados por el coronavirus. Contrastando con ese tono, nos encontramos con un carnaval. Vamos a los elementos de forma, porque los participantes entraban al estilo de los Premios Oscar, había un podio y una música alegre de fondo. La calidad de los discursos fue muy baja, todos repitieron el mismo mensaje: evitar el presunto caos socialista que se generaría si gana Joe Biden. Ayer vimos a Donald Trump y a Mike Pence celebrando con un grupo de seguidores y nadie tenía una mascarilla. La Convención Republicana ha sido un homenaje al nepotismo”, dijo Maza.
La campaña del Partido Republicano se ha centrado en acusar al Partido Demócrata de ser socialista y radical, incluso Trump afirmó que si gana Biden los “Estados Unidos sería una Venezuela a gran escala”.
“Esas acusaciones hubieran funcionado si el candidato hubiera sido Bernie Sanders o Elizabeth Warren, quienes representan el ala más radical de izquierda del Partido Demócrata. Sin embargo, Biden siempre se distanció de ellos y ocupa una posición de centro, esos señalamientos no van a calar. Hay que ver un componente importante que son los debates. El primero se realizará el 29 de septiembre. Ese será el primer evento de campaña electoral donde se van a poder contrastar ambas propuestas. Cuando la gente vea que Biden no está hablando de nacionalizar la banca, estatizar las empresas privadas, ni prohibir las religiones, se dará cuenta que esa acusación no tiene fundamento político”, explicó el analista.
Maza también destacó que el Partido Republicano está desesperado porque ninguna encuesta da como ganador a Donald Trump. Asimismo, agregó que intentan politizar todos los temas. “Han dicho que antes de fin de año se puede tener la vacuna del coronavirus, cuando especialistas dicen que eso no es posible; están manoseando de la manera más descarada los casos del coronavirus y han dicho que la epidemia ya va en descenso. Se ha politizado todo, porque ese es el tema más fuerte”.
Si algo llama la atención en una campaña electoral estadounidense, es que se están apelando a calificativos ofensivos y señalamientos sin fundamentos.
“Es la primera vez que vemos en una campaña, que el presidente saliente como Barack Obama, menciona por nombre al presidente en ejercicio, Donald Trump. Eso es políticamente incorrecto, pero ese es el tono de la campaña. Estamos en un nivel de incorrección política y de guerra sucia”, destacó Maza.
América Digital
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