La noticia está en la ciudad de Londres, luego del anuncio de la dimisión del primer ministro Boris Johnson, como líder del Partido Conservador. Vamos allá, en la línea telefónica está Rafa de Miguel, corresponsal del madrileño El País.
CMR- Rafa, muy buenos días, buenas tardes por allá. Gracias por atendernos.
RDM- Muy buenas tardes, encantado de estar en el programa con ustedes.
CMR- Gracias Rafa ¿Cuál es el ambiente en estos momentos en el Reino Unido. Por lo visto al señor Johnson le ha caído todo encima y le acusan de ser el responsable de su propia caída? Me llamó la atención un titular de un artículo en el Washington Post, que decía: “¿Por qué renunció Johnson y no Trump?, asumiendo que son políticos de estilos parecidos. ¿Cómo se ve la situación allá en Londres, Rafa?
RDM- Creo que hay una mezcla de alivio y de inquietud. Alivio, porque en los últimos meses la situación de Boris Johnson se había vuelto prácticamente insostenible. Uno tras otro los escándalos habían minado su credibilidad e integridad política, y eran cada vez más los miembros del Partido Conservador que estaban convencidos que de la mano de Johnson estaban abocados a una derrota electoral en las próximas convocatorias de las urnas. Pero por otra parte, hay inquietud, porque Johnson ha dicho que renuncia a liderar el Partido Conservador, pero se quedará en el puesto hasta que se elija a un sustituto. Y los procesos de elección en el Partido Conservador son bastante más lentos de los que pretenderían en estos momentos. El último que fue en 2019, cuando dimitió Theresa May, duró cerca de dos meses muy complicados, donde un montón de candidatos presentaron sus programas y tuvieron que ir descartando uno a uno, hasta que al final salió victorioso Boris Johnson. Johnson ha dicho al Partido Conservador que quería permanecer en el puesto de primer ministro hasta que se realice el próximo congreso del partido, previsto para octubre, y que fuera allí cuando se nombrara oficialmente al nuevo líder o la nueva lidereza, y por lo tanto al nuevo primer ministro. Hay muchos conservadores que están muy inquietos ante esta idea, porque Johnson no ha sido forzado a dimitir porque se haya retirado la confianza en él o porque no están de acuerdo con las políticas emprendidas, se le ha retirado el apoyo porque no se fían de él, no se fían de su credibilidad, y están convencidos de que no ha hecho más que engañarles en estos meses y bajo estas condiciones, con ese carácter, esa actitud, y siendo como es el personaje, porque Johnson es un personaje muy excéntrico y especial, es complicado tenerlo entre dos y tres meses en el gobierno con una situación de aparente estabilidad.
CMR- Luce como una burla a quienes les han presionado: “Me voy del partido, pero no me voy del gobierno” ¿No hay otra forma de que él tenga que salir del gobierno?
RDM- En principio no vendría a ser una burla. Del mismo modo que Theresa May aguantó como primera ministra en funciones durante dos meses hasta que se eligiera su sustituto, o como lo hizo David Cameron cuando también dimitió después del referéndum fallido del Brexit en 2016, lo normal es que por responsabilidad y lealtad al partido y al país, el primer ministro saliente aguantara sin ningún problema, sin tomar decisiones importantes, sin cambiar el rumbo de la política del gobierno. Simplemente, manteniendo la máquina perfectamente operativa y que dé cierta estabilidad y tranquilidad en la transición del gobierno. Pero eso sería una situación normal. Nada en lo que se refiere a Boris Johnson ha sido normal desde que ocupó el puesto de primer ministro en Downing Street. Eso es lo que atemoriza a los miembros del Partido Conservador. ¿Qué se puede hacer?: habrá una reunión el próximo lunes del llamado comité 1922, es el comité que reúne a todos los diputados conservadores que no tienen un cargo en el gobierno. En la jerarquía parlamentaria británica los diputados se dividen en “front bencher” y “back bencher”. Los primeros son los de los escaños delanteros y son aquellos que además de diputados tienen un cargo en el gobierno y por lo tanto, a la hora de votar siempre votarán a favor del gobierno porque además le deben el sueldo. Los segundos, son los de las bancadas traseras, y son diputados mucho más libres a la hora de decidir, son la mayoría del grupo parlamentario y son los que toman las decisiones más importantes a lo que se refiere el partido. Ese comité 1922, el lunes tiene que tomar una decisión respecto a cuál será la agenda del proceso de primarias y cómo se pondrá en marcha el proceso de elección de un nuevo líder, y todo sugiere que van a cambiar las reglas para acelerar el proceso y conseguir que antes de que se cierre el periodo de sesiones del parlamento previsto para el 21 de julio, de los 10 candidatos que ya se han postulado como primer ministro y líder del partido queden únicamente dos. Si quedan solo dos, y al final solo votan los afiliados del partido, es previsible que a finales de agosto y principios de septiembre, ya haya un líder del Partido Conservador y un primer ministro para sustituir a Johnson. Otra alternativa es decirle a Johnson que salga de Downing Street y que abandone definitivamente el cargo y permita que otro de los ministros ocupe el cargo y mantenga el timón de la nave, mientras se elija el próximo líder. Todo eso podría ocurrir. De momento estamos esperando a ver qué pasa.
CMR- Esperaremos, pero lo has dicho muy claro Rafa. Con Boris Johnson nada es normal. Te agradezco mucho estos minutos en la mañana de hoy.
RDM- Muy bien, un abrazo muy grande.
Estas fueron las declaraciones que ofreció el periodista Rafa de Miguel en el programa radial Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.