Joe Biden habló la noche de ayer por primera vez ante el Congreso, en un discurso en el que expresó su voluntad reformadora, en particular en materia fiscal.
El presidente, con mascarilla, fue recibido con aplausos, mientras subía al escenario en su primer discurso en una sesión conjunta, en medio de una pandemia, en lugar de las 1.600 personas que suelen asistir, el aforo fue de 200.
En vísperas de cumplir los primeros y simbólicos 100 días en el poder, Biden expuso su proyecto para las “familias estadounidenses”, que contiene una “inversión histórica” en educación y en la infancia, por un monto cercano a los 2 billones de dólares.
Javier Maza, asesor y analista político especializado en comunicación política, abordó el tema en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.
“Dio cifras impresionantes como 220 millones de vacunas contra el COVID-19, 1.350.000 nuevos empleos en los primeros tres meses de su administración. Esto es un récord y ha superado ampliamente a su antecesor Donald Trump. También anunció muchísimas metas ambiciosas. Habló de una reforma migratoria, policial, sobre una ley para evitar las ventas de armas. Su agenda política es muy ambiciosa y tiene resultados destacables en sus primeros 100 días”, dijo Maza.
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Biden ha dicho que no quiere ser un presidente más del montón. Quiere que su periodo presidencial sea histórico.
“Creo que si va a poder lograr todo lo que ha dicho. Estamos hablando de temas que sobrepasan la agenda de un partido. En primer lugar, el tema de los Dreamers no es demócrata o republicano, es un tema de los Estados Unidos que nos duele como sociedad. Establecer un control sobre la venta de armas también es un tema que trasciende, porque es casi una rutina que hayan masacres”, explicó el experto.
Maza indicó que Biden invoca el trabajo conjunto. “Ese tono nos lleva a una posible integración de esfuerzos para sacar una reforma migratoria, la reforma policial y la prohibición de ventas de armas. El nuevo paquete de ayuda es necesario y la economía ha mejorado. Estamos viendo nuevos empleos. Estos son los resultados para todos los Estados Unidos”, destacó.
Las políticas económicas de Biden hacen recordar a las políticas keinisianas de Franklin Roosvelt.
“La comparación es válida. A Roosvelt lo tildaron de comunista, anarquista y otras cosas porque impulsó el seguro social y el seguro de desempleo. Ahora estamos con una agenda muy ambiciosa y Biden quiere rescatar el valor de los sindicatos. Además es cierto, este país lo hizo la clase media y no Wall Street. Lo que está planteando para pagar esta factura tremenda que generan sus planes económicos, es que el 1% de los contribuyentes paguen los impuestos que le tocan. Las facturas tienen que pagarlas los que más tienen y eso es lo justo”, explicó Maza.
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