El secretario de Estado, Mike Pompeo, se negó a aceptar la victoria de Joe Biden como presidente electo y dijo en el Departamento de Estado que “habrá una transición tranquila a una segunda administración Trump”.
Estas declaraciones elevan la tensión política que prevalece en Estados Unidos luego de las elecciones.
Varios analistas señalan que uno de los desafíos de Joe Biden al llegar al poder es reconstruir la institucionalidad en el país.
Hernán Molina, analista político, analizó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
“Las declaraciones de Mike Pompeo son quijotescas, como si estuviera peleando con molinos de viento. No están basadas en la realidad, forman parte de la narrativa creada por Trump para deslegitimar la victoria de Joe Biden, quien ganó por más de 4 millones de votos. Trump nunca se sintió legítimo al no ganar el voto popular en 2016 y ahora Biden gana el voto popular con más ventaja. Los republicanos son cómplices de Trump porque repiten lo que dice el presidente o se quedan callados. En el caso de Pompeo, quien es el canciller y representa a los Estados Unidos en el mundo, es muy lamentable que diga esas declaraciones. Macron, Merkel y Boris Johnson ya han felicitado a Biden. Esto hace que Estados Unidos sea un paria en el mundo. Lo único que le importa a Trump es él mismo y sus funcionarios lo ponen por encima del país”, afirmó Molina.
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Trump insiste en denunciar un presunto fraude, mientras despide al Secretario de Defensa y se espera que pueda realizar otros cambios en el gabinete.
“El presidente es impredecible y no piensa en el país. No fue como lo hizo Al Gore en el año 2000 o Hillary Clinton en 2016. El presidente no tiene interés en el país. Lamentablemente hay mucha gente que está alrededor del presidente que no lo ayudan a comprender que ha perdido la presidencia. Denunciar que los medios son los que están cantando la victoria es una falsedad, siempre ha sido así. Eso es no reconocer que hay una tradición y una democracia. Trump y sus funcionarios no están capacitados para asumir esa decisión, que es muy importante para que se realice una transición pacífica en medio de una pandemia”, agregó el analista.
Pasado el 3 de noviembre, toda la atención se comienza a focalizar en la fecha del 14 de diciembre, cuando el Colegio Electoral pronuncie los resultados.
“En muchos estados la situación se podría resolver antes del 1 de diciembre. Esperemos no llegar al pronunciamiento del Colegio Electoral el 14 de diciembre, porque sería casi un mes y eso atentaría contra la seguridad nacional. No hay pruebas de fraude. Es tiempo para madurar, crecer y pensar en la patria para que la democracia siga adelante. No hay que involucrar a toda una nación en el berrinche de un presidente”, puntualizó Molina.
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