Siguen las reacciones tras el cuestionado proceso electoral de Nicaragua. Este martes la OEA pidió a sus miembros responder ante estos comicios, mientras Estados Unidos calificó de “dictadura” a la administración de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Ana Lucía Álvarez, activista, defensora de los derechos humanos y familiar de tres presos políticos, abordó el tema en el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón.
«En este momento la situación en Nicaragua es realmente alarmante por la represión y el terrorismo de estado que vivimos todos los días. El levantamiento popular de 2018 fue de naturaleza cívica y la apuesta política también, pero del otro lado el régimen ha mantenido una política de represión. Nicaragüense que sale con su bandera u opina por las redes sociales es perseguido. Esa situación se elevará con la farsa electoral. Si algo logramos hacer en el país, a pesar de la represión, fue demostrar el descontento. Las organizaciones que monitorearon el proceso indican que la abstención fue del 80%. Sin embargo, ellos tienen la policía y el ejército. La comunidad internacional debe concretar herramientas para que logren quebrar a la dictadura de Daniel Ortega”, dijo Álvarez.
Ver más: ¿Qué le espera a Nicaragua luego del fraude electoral perpetrado por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo?: Periodista Maynor Salazar lo explica
En cuanto a la situación de sus familiares presos, la activista manifestó que su hermana y dos tías están tras las rejas.
“Están detenidas por ser disidentes a la dictadura de Ortega y por levantar su voz. Ellas cuestionaron el poder y buscaron una salida electoral a la crisis. Esa es la razón de fondo, pero los poderes e instituciones al servicio de la dictadura las acusan de traición a la patria”, expuso.
Álvarez destacó que la última vez que tuvo contacto con sus familiares fue en el mes de octubre.
“No hemos sabido nada y la situación de incertidumbre crece con el último discurso de Ortega lleno de odio. No tenemos idea que le están haciendo adentro a los presos políticos. Sabemos que están en un centro de torturas”, explicó.