FA/CMR
Hoy se cumple un año después que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara que el virus que en febrero de 2020 nombró covid-19, era una pandemia. Ese dÃa los casos confirmados de COVID-19 sumaban 125 mil y las muertes reportadas superaban apenas las 5 mil.Â
Hoy, más de 118 millones de personas se han infectado en todo el mundo y, según la Universidad Johns Hopkins, más de 2,6 millones han fallecido.
En Estados Unidos la cifra alcanza a más de 29 millones de infectados y más de 529 mil personas fallecidas.
Para hacer un balance de este año es necesario tocar algunos puntos:
Las restricciones para evitar la expansión del virus a nivel global han tenido un fortÃsimo impacto en la sociedad, que tras un año de pandemia presenta disparidades más marcadas a nivel económico y social, en paÃses pobres, o en función del género y la edad.
Tomemos el caso de los niños. La directora ejecutiva de UNICEF, Henrietta Fore, ha advertido que un año después del comienzo de la pandemia, los avances que se habÃan alcanzado han retrocedido en prácticamente todos los indicadores claves sobre la infancia. «El número de niños que pasan hambre, están aislados, son vÃctimas de abuso, sufren ansiedad, viven en la pobreza y se ven obligados a contraer matrimonio, ha aumentado»
UNICEF prevé que en los paÃses en desarrollo, la pobreza infantil aumentará en torno a un 15 por ciento y otros 140 millones de niños de vivirán en hogares que se encuentran por debajo del umbral de la pobreza.
En cuanto a la educación, las escuelas de más de 168 millones de niños en edad escolar de todo el mundo llevan casi un año cerradas. Dos terceras partes de los paÃses donde las escuelas han cerrado total o parcialmente se encuentran en América Latina y el Caribe.También las diferencias de acceso a internet han acrecentado las diferencias de acceso a la educación.
En un artÃculo para el Financial Times, Yuvah Noah Harari, autor de los best sellers Homo Deus y Sapiens, resaltó las ventajas que nuestra sociedad tiene hoy con relación a otros momentos de la historia donde se han sufrido pandemias, de la mano de la ciencia, la biotecnologÃa y la tecnologÃa de información:
Cito: “2020 mostró que la humanidad está lejos de ser indefensa. Las epidemias ya no son fuerzas incontrolables de la naturaleza. La ciencia las ha convertido en un desafÃo manejableâ€.
La ciencia ha demostrado su poder y su asertividad.Es la primera vez que se está siguiendo a tiempo real la evolución de un virus pandémico. El análisis de las secuencias del SARS-CoV-2 no tiene precedentes.
Esto es lo que ha permitido el desarrollo de vacunas y tratamientos. Según el portal bio RENDER ahora son 204, las candidatas a vacunas en el mundo. Y hay más de 400 ensayos clÃnicos en curso de tratamientos terapéuticos  Todo ello se comparte y se distribuye entre los cientÃficos del mundo, que trabajan en cooperación, a través del internet.
Continúa Harari:
Cito: “Hoy en dÃa, muchos de nosotros vivimos en dos mundos: el fÃsico y el virtual. Cuando el coronavirus circuló por el mundo fÃsico, muchas personas cambiaron gran parte de sus vidas al mundo virtual, donde el virus no pudo seguir.
La humanidad se retiró al mundo virtual, porque el mundo material era inhabitable hasta el control del virus letal, y mucho de la vida continuó de manera digitalâ€.Â
Pero para el pensador esto también entraña riesgos: “La tecnologÃa de la información nos ha hecho más resistentes frente a los virus orgánicos, pero también nos ha hecho mucho más vulnerables al malware y la guerra cibernética.â€
Sin embargo, al hacer el balance, hay un punto que resalta el historiador israelÃ. Y es que frente a la ciencia y la tecnologÃa, los errores que se han cobrado la vida de millones, son humanos.
La respuesta a la pregunta que nos brinda Harari, de ¿por qué han fallecido más de 2,6 millones de personas en el mundo? es sencilla: “Por malas decisiones polÃticasâ€
Le cito: “Por ejemplo, los presidentes populistas de los Estados Unidos y de Brasil minimizaron el peligro, se negaron a hacer caso a los expertos y en cambio impulsaron teorÃas conspirativas...No crearon un plan de acción federal sensato y sabotearon los intentos por detener la pandemia de las autoridades de los estados y los municipios. La negligencia y la irresponsabilidad de los gobiernos de Trump y Bolsonaro han provocado cientos de miles de muertes evitablesâ€.
El año pasado en un artÃculo también en el Financial Times, el historiador y filosófo, Yuvah Noah Harari  decÃa que «Las decisiones que tomen los gobiernos y pueblos en las próximas semanas probablemente darán forma al mundo que tendremos en los próximos años…Esta tormenta pasará. Pero las decisiones que tomemos ahora podrÃan cambiar nuestras vidas en los años veniderosâ€
Y ocurrió. Un año más tarde, hemos visto cómo la cooperación cientÃfica ha logrado grandes aciertos, mientras que el falso nacionalismo, la falta de cooperación para desarrollar un plan mundial y la guerra de liderazgo que han marcado las decisiones de algunos polÃticos son los verdaderos responsables de que esta historia se cuente hoy asÃ, en vidas perdidas.