De acuerdo con un reportaje publicado por la revista Semana, existen pruebas de que el Ejército en Colombia ejecutó un plan de espionaje del que fueron víctimas al menos 130 personas de ese país.
Periodistas, políticos y miembros de organizaciones no gubernamentales, destacan como algunos de los «blancos» principales.
Entre los meses de febrero y diciembre de 2019, señala el trabajo publicado, algunos militares colombianos recolectaron a través de herramientas informáticas, datos personales de sus «objetivos». Teléfonos, direcciones de residencia, correos, amigos, familiares y hasta centros electorales, es parte de la data que presuntamente habrían recabado los miembros de ejército.
En una entrevista para el programa Día a Día, conducido por César Miguel Rondón, el director ejecutivo de la Fundación para la Libertad de Prensa de Colombia (FLIP), Pedro Vaca, afirmó que estos hechos «salen de todo marco legal».
De acuerdo con sus declaraciones, todavía el Ejército no ha ofrecido ningún tipo de explicación sobre los «perfiles» que se estaban preparando.
Sin embargo, el especialista consideró que Colombia es un país «con una tradición de espionaje»; en donde el poder político se ha perseguido mutuamente en los últimos 25 años.
A su juicio, acciones de este tipo afectan el ejercicio democrático. Los periodistas, precisó, deben sentir la tranquilidad de que el Estado «no está escarbando sus fuentes».
No es la prensa la que debe sentir culpa por ser vigilada, perfilada y denunciar las irregularidades en el @COL_EJERCITO
Es el Ejercito colombiano?? el que debe agradecer que – a pesar de sí mismo- cuenta con una prensa que le ayuda a corregir el rumbo y garantizar los derechos
— Pedro Vaca V. (@PVacaV) May 3, 2020
Entre las revelaciones más llamativas de la revista Semana, se subraya que corresponsales de medios norteamericanos como The New York Times y The Wall Street Journal, fueron las principales víctimas del escrutinio militar.
¿Cuál ha sido la respuesta del Gobierno?
«Lo recibimos de buena fe», expresó Pedro Vaca. A propósito de las declaraciones de presidente Iván Duque y del ministro de la Defensa, Carlos Holmes Trujillo, quienes rechazaron estas prácticas llevadas a cabo por un grupo de uniformados.
Ahora bien, el director del FLIP destacó que –de todas maneras– tuvo que haber habido fallas en algunos nodos; en el supuesto de que estos militares hayan actuado por cuenta propia.
«Deben esclarecerse las responsabilidades», exigió, al tiempo que expresó que Colombia es una nación que no puede emular prácticas de regímenes autoritarios.
Dado que Jorge Mario Eastman, ex secretario general de la presidencia de Duque, también terminó en el dossier del Ejército, Vaca señaló que la discusión política en Colombia está muy polarizada.
«No solo entre partidos enfrentados, sino también a lo interno de las propias organizaciones», sentenció.