FA/CMR
En su columna Abierta al tiempo, de la plataforma La Gran Aldea, Paola Bautista Alem谩n, doctora en Ciencia Pol铆tica por la Universidad de Rostock (Alemania) y聽 Presidente del Instituto de Estudios Pol铆ticos FORMA, escribe sobre el importante rol de los reformadores.
Dice Paola: 鈥淎l profundizar en procesos de transici贸n hacia la democracia que se concretaron en pactos pol铆ticos, encontramos aspectos importantes como la unidad de las fuerzas opositoras o la solidaridad internacional. Y, junto a estos asuntos que no son menores, se encuentra una realidad insustituible: Los reformadores. Sin duda, hay numerosos asuntos que son relevantes y merecen nuestra atenci贸n, pero este componente no debe faltar. Me refiero a quienes, siendo parte de la estructura de dominaci贸n, se disponen a cambiar el curso de la historia. Son figuras enigm谩ticas y opacas. Sus nombres ocupan pocas l铆neas en los libros de texto. Detr谩s de cada pacto se puede encontrar una persona o un grupo de personas que -por diversas razones- han vivido un proceso de conversi贸n personal hacia la libertad, y logran doblegar la voluntad de quienes aspiran a permanecer en el poder.
Es importante tener en cuenta -al menos- dos asuntos sobre estos personajes: primero, generalmente han nacido y crecido en la dictadura. Nunca han sido agentes externos ni impuestos por movimientos adversos. Y, segundo, cuentan con un peso interno espec铆fico que les permite articular corrientes reformistas que buscan cambios desde adentro hacia afuera鈥
驴Podr铆amos identificar estas figuras actualmente en Venezuela, que viniendo del chavismo sean capaces de generar cambios importantes en nuestro pa铆s?
Paola Bautista Alem谩n refiere tres casos: Torcuato Fern谩ndez-Miranda, quien construy贸 la arquitectura jur铆dica que permiti贸 ir 鈥渄e la ley a la ley鈥 en Espa帽a; Carlos C谩ceres, quien fuera el representante de Augusto Pinochet en las negociaciones con la concertaci贸n; Alexander Yakovlev, el cerebro que anim贸 a Mikhail Gorbachev en el glasnost y la perestroika.
Se帽ala Alem谩n: 鈥淎spirar a un cambio pol铆tico negociado que se fundamente en pactos duraderos es deseable. Y esa noble aspiraci贸n debe acogerse con esperanza responsable. En ese sentido, conviene distinguir con humildad cu谩les asuntos dependen de nosotros y cu谩les reposan en el azar (o en la Providencia). De nosotros depende fortalecer y crear espacios que representen verdaderamente a la sociedad venezolana y tengan la capacidad de encarnarla en eventuales escenarios de negociaci贸n. Sin representaci贸n real dif铆cilmente habr谩 espacios de encuentro, confiables y eficientes, que puedan contar con el respeto y el impulso de eventuales reformadores. Durante a帽os he pensado en este tema鈥, contin煤a Alem谩n.聽
Y, a帽ade que 鈥渄espu茅s de reflexionar y recorrer el pa铆s, creo que la tarea de construir una representaci贸n real capaz de articular nuestros deseos de democracia debe sostenerse en cinco pilares: el predominio de un liderazgo moral, la preeminencia de la conciencia libre, un sentido de laboriosidad generoso, una apertura audaz que anime a una unidad extensa y el regreso a los rasgos m谩s nobles de nuestra cultura republicana y criolla. El horizonte est谩 abierto. El pa铆s y los reformadores que puede esconder la estructura del mal, que no ha logrado dominarnos, nos espera鈥
De manera pues, que en Venezuela, se buscan reformadores como estos.