FA/CMR
El miércoles 13, cuando los ojos del mundo se enfocaban en lo que ocurrÃa con el Presidente Trump en el debate para acusarle en el Capitolio, la organización Human Rights Watch (HRW) denunciaba la «consolidación» de las «dictaduras» en Cuba, Nicaragua y Venezuela y alertaba sobre la ausencia de liderazgo en materia de derechos humanos en Latinoamérica, debido en parte al populismo de los Gobiernos de Brasil y México, los dos mayores paÃses de la región.
En su informe anual, en el que repasa la situación de los derechos humanos en el mundo. Retrata un año 2020 verdaderamente complicado, donde la pandemia ha sido aprovechada por algunos lÃderes para restringir aún más las libertades, concentrar el poder y limitar los derechos en democracia.
En el caso de Latinoamérica, se destaca la «consolidación de tres dictaduras» en Venezuela, Nicaragua y Cuba, regÃmenes que están «más fuertes que nunca».
Las razones que argumenta Human Right Watch son la «ausencia manifiesta de liderazgo por la causa de los derechos humanos» en la región que hace más difÃcil enfrentar a esos Gobiernos. Toma como ejemplo a Brasil y México que se encuentran en extremos polÃticos incompatibles. En ambos paÃses el populismo es la manera de hacer polÃtica, la demagogia rige la retórica de esos lÃderes.
Vivanco explicó que, aunque los Gobiernos de Jair Bolsonaro y Andrés Manuel López Obrador » en ambos casos hay un desprecio profundo por los valores democráticos, por las libertades públicas, por los derechos humanos, por el Estado de derecho».Â
Para HRW, la falta de voces latinoamericanas capaces de promover y defender la causa de los derechos humanos «no ayuda a un panorama que permita mejorar el estado de los derechos humanos a nivel regional», a pesar del papel positivo que han tenido iniciativas como el Grupo de Lima en el caso venezolano.
Y si se sube en el continente, la situación no cambia. La “conducta despótica y también populista», como se refiere Vivanco a los haceres del Presidente Donald Trump no han ayudado por su falta de atención a nivel internacional a la causa de los derechos humanos y además por el daño que le ha infligido a la credibilidad de la democracia del paÃs.
Pero en el caso venezolano sus preocupaciones son legÃtimas. El jueves le entrevistamos en nuestro programa de radio y fué enfático:
“Lo de Venezuela es grave, porque es una combinación de crÃmenes de lesa humanidad cometidos por una dictadura consolidada cada vez más en el poder, y una emergencia humanitaria nunca vista en la región. Es una situación que no tiene ni precedentes en la región, ni un caso similar al que se sufre en Venezuela. Solo han regresado a Venezuela alrededor de 135.000 personas de los millones que se han ido. La dictadura está en una etapa de consolidación. Y en este instante están aprovechando las nuevas condiciones con las que cuentan para acelerar al máximo un gobierno sobre la base del terror en Venezuela. Las Faes tiene un récord de más de 21.000 asesinatos en supuestos casos de resistencia a la autoridad, desde el 2016. Al haber desaparecido la Asamblea Legislativa, que es lo único que quedaba que no controlaba el régimen, creo que ellos se han interpretado esta nueva etapa como que ya no tienen que guardar las aparienciasâ€Â
Pareciera entonces que a este 2021 se seguirán sumando nuevas violaciones, ahora cada vez más vulgarmente impunes en estos paÃses donde la dictadura barre con todo vestigio de verdad.