En el a帽o 2005, el historiador mexicano, 聽Enrique Krauze, escribi贸 una columna para el diario madrile帽o, El Pa铆s, en la que se analizaba el聽 fen贸meno del populismo que ya se sent铆a crecer en聽 Am茅rica Latina y que ahora hace vida en Europa y Estados Unidos.聽
Pero 驴 qu茅 hace a ese an谩lisis algo tan actual?
El populismo en Iberoam茅rica, dec铆a Krauze 鈥渉a adoptado una desconcertante amalgama de posturas ideol贸gicas. Izquierdas y derechas podr铆an reivindicar para s铆 la paternidad del populismo, todas al conjuro de la palabra m谩gica 鈥榩ueblo鈥.鈥
Dec铆a Krauze 鈥渟on cara y cruz de un mismo fen贸meno pol铆tico cuya caracterizaci贸n, por tanto, no debe intentarse por la v铆a de su contenido ideol贸gico, sino de su funcionamiento鈥.
En el texto colocaba en el mismo saco al general Juan Domingo Per贸n y Hugo Ch谩vez, en espectros ideol贸gicos diferentes pero con caracter铆sticas evidentes de liderazgo populista.
Nosotros que como venezolanos hemos sido v铆ctimas y testigos de ese populismo totalitarista, deber铆amos saber 鈥渙lerlo鈥 a la distancia. Por eso vale la pena, volver sobre esos聽 rasgos esenciales que propone el autor:
El populismo exalta al l铆der carism谩tico. El hombre providencial, entregado a los problemas del pueblo, dice Krauze y聽 cita a Max Weber:
鈥淟a entrega al carisma del profeta, del caudillo en la guerra o del gran demagogo no ocurre porque lo mande la costumbre o la norma legal, sino porque los hombres creen en 茅l. Y 茅l mismo, si no es un mezquino advenedizo ef铆mero y presuntuoso, 鈥榲ive para su obra鈥. Pero es a su persona y a sus cualidades a las que se entrega el discipulado, el s茅quito, el partido鈥.
El populista, a帽ade el escritor,聽 no solo usa y abusa de la palabra: se apodera de ella.
Krauze explica una evidencia que ha sido palpable para cualquier venezolano, dice, 鈥淟a palabra es el veh铆culo espec铆fico del聽 carisma del populista. Se siente el int茅rprete supremo de la verdad general y tambi茅n la agencia de noticias del pueblo. Habla con el p煤blico de manera constante, atiza sus pasiones, 鈥渁lumbra el camino鈥, y hace todo ello sin limitaciones ni intermediarios.
Dice Kauze 鈥Per贸n aprendi贸 la importancia pol铆tica de la radio, que Evita y 茅l utilizar铆an para hipnotizar a las masas.聽 Ch谩vez, por su parte, ha superado a su mentor Castro en utilizar hasta el paroxismo la oratoria televisiva鈥.
En los tiempos que vivimos el l铆der populista tiene sus redes sociales, el twitter, como su medio principal, su voz est谩 a un clic de ese pueblo al que dice representar y como聽 vemos, tambi茅n ese pueblo verdadero o con ayuda de 鈥榖ots鈥, amplifica su alcance.聽
Contin煤a Krauze advirti茅ndonos que el populismo fabrica la verdad, 鈥渋nterpreta la voz del pueblo, eleva esa versi贸n al rango de verdad oficial, y sue帽a con decretar la verdad 煤nica. Como es natural, los populistas abominan de la libertad de expresi贸n鈥.
鈥淐onfunden la cr铆tica con la enemistad militante, por eso buscan desprestigiarla, controlarla, acallarla鈥.聽
Cuando lo que se dice contrasta su verdad, para el populista no hay duda, el emisor es el enemigo, porque 茅l como l铆der es el 煤nico due帽o de la verdad.Y ahora visto en el presente qu茅 煤til es para lograrlo, el uso de las 鈥渇ake news鈥
Krauze nos recuerda que el populista alienta el odio de clases. Conocemos c贸mo lo hizo Ch谩vez,聽 el odio contra las clases pudientes, con los empresarios e incluso, luchando contra la meritocracia, si fuera como lo fue, necesario. 驴Recuerdan el despido de los 20 mil trabajadores especializados de Pdvsa? Otros l铆deres, lo hacen contra la clase pol铆tica para poder venderse como individuos puros no contaminados frente a 鈥渆sos enemigos del pueblo鈥 y despiertan los miedos para hacer visibles las diferencias. Los negros, los hispanos, los extranjeros que se aprovechan del sistema.
Krauze enfatiza que el populista moviliza permanentemente a los grupos sociales.
鈥淓l populismo apela, organiza, enardece a las masas. La plaza p煤blica es un teatro donde aparece 鈥榮u Majestad el Pueblo鈥 para demostrar su fuerza y escuchar las invectivas contra 鈥榣os malos鈥 de dentro y fuera. Aclara Krauze que聽 鈥楨l pueblo鈥, no es la suma de voluntades individuales expresadas en un voto y representadas por un Parlamento; sino una masa selectiva y vociferante como la聽 que caracteriz贸 聽Groucho Marx: 鈥淓l poder para los que gritan 鈥樎l poder para el pueblo!鈥欌聽
A falta de teatro,聽 el twitter da parlantes disonantes a todos,聽 grita como nunca antes, ese pueblo.
Enrique Krauze, identifica al聽l铆der populista, 鈥渋nmune a la cr铆tica y al茅rgico a la autocr铆tica鈥con la acci贸n de buscar el error o la falla fuera de s铆, el chivo expiatorio, desv铆a la atenci贸n interna hacia el adversario de fuera. La Argentina peronista, el castrismo y el chavismo lo hicieron, con diversos estilos, al situar a Estados Unidos como el culpable, el enemigo exterior que nos ataca. 驴Lo recuerdan ustedes?
El escritor mexicano, afirma que el populismo desprecia el orden legal.
Recuerda como una vez en el poder Ch谩vez, 鈥渆l caudillo tiende a apoderarse del Congreso e inducir la 鈥榡usticia directa鈥 鈥減opular鈥, 鈥渂olivariana鈥 El Congreso, la Corte se convierten en un ap茅ndice del poder del l铆der populista.
Y, quiz谩s lo m谩s importante,聽 que destaca Krauze es que (FRASE) 鈥渆l populismo abomina de los l铆mites a su poder, mina, domina y, en 煤ltimo t茅rmino, domestica o cancela las instituciones de la democracia liberal鈥. Se niega聽 a regirse por sus normas, bombardea la f茅 en esas instituciones para poder sobrevivir.聽
Finaliza, Krauze con una sentencia vital: 鈥淒esde los griegos hasta el siglo XXI, pasando por el aterrador siglo XX, la lecci贸n es clara: el inevitable efecto de la demagogia es 鈥榮ubvertir la democracia鈥櫬